No temas

martes, septiembre 3, 2013 Permalink 0



Descansa sobre mi pecho.

Detrás de la ventana han estallado mil truenos.

Disfruta del nido de mis brazos.

Siente un afecto absolutamente renovado.

Los sueños no albergan heridas,

más allá de un soplido o un rumor de mar.

Entra en un profundo letargo

dulcemente mecido por el ángel custodio.

El mar rumorea lejanas batallas

mientras salpica tu frente de esperanza y sal.

No temas.

Respira la serenidad que exhala

mi pecho contra tu espalda.

El viento aúlla por el desfiladero.

Reparte el eco de la terrible guadaña.

Esta noche la única luz es tu sonrisa

aleteando por las cortinas un poco de paz.

Olvida tus manos vacías y deja que sea el corazón

nuestro maestro de ceremonia.

Cierra los ojos.

No temas.

La vida nos espera.

Más allá del suspiro.

El último suspiro.