Recortemos el espacio

domingo, octubre 7, 2012 Permalink 0

Imagen: Grant Newland.

Jugando con la nostalgia me encontré con el pasado.
Cubierto de polvo, le faltaban algunos trozos.
Aun era mi mejor y más silencioso amigo.
Lo cubrí de colores para devolverle su esplendor.

Me subiré a una ilusión, antes que el destino marque las reglas,
y el rumbo fuera otro al trazado.
Plantaré aromas de cuento,
y las hadas jugarán a modo de carrusel.

Me gusta que la pasión se desborde.
Perder el sentido del ridículo y morderte ese mentón.
Fotografiarte por partes para disfrutar cada rincón de tu cuerpo.
El borde tus labios se cubre de rocío y aromas de mar.

Caminas descalza.
El viento ha dejado de aullar
Las estrellas de mar corretean por tus pies.
Juegan al escondite entre tus dedos.

La habitación huele a vainilla. Y si sonríes, incluso a melocotón.
Cuando te estiras, incluso, a menta y hierbabuena.
Ya cuando estas alegre y bailas, a caléndulas y jazmín.
Una invitación a pasear por las nubes cogidos de la mano.

Un desfile de inquietas hormigas surca mi espalda.
He dejado aparcado un pensamiento en la espuma del café.
Pondré el mundo al revés para que caigas en mis brazos.
Adoro el calor con el que envuelves la sonrisa.

Jugar desde la raíz de tu pelo a las pestañas.
Aquí me quedo mirando al viento.
Saltemos por los tejados y bebamos de la lluvia.
Nubes que aliñan la noche que ofreciste al viento.


Sobre el viento congrego a los corazones errantes.
Recortemos el espacio entre nosotros,
Colguemos de los estambres unas cuentas de colores.
Embadurnemos con golosinas la comisura de los labios.