Me encanta esta vida
 
disparatada e inconexa.
 
En el que  entre el todo y la nada
 
te quedas con la persona amada.
 
 
 
Sobran tópicos al decir
 
que  prefiero una parte de ti
 
que todo un orden del universo
 
repleto de promesas y tentación.
 
 
Tan solo te pido:
 
Un sabor que recordar.
 
Un tacto que recrear.
 
Un aroma que respirar.
 
 
Dame un puñado de realidad
 
a la que aferrarme.
 
A cambio te entregaré
 
fragmentos diarios de mi alma.
