Sentimientos certeros

sábado, octubre 9, 2010 Permalink 0

Imagen: Irina Todorova







Aquellos momentos que me dejas sin respiro

son los que me otorgan la vida que necesito

y sobre los que garabateo sentimientos certeros.




Mil porciones destiladas

en el cuenco de la mirada

escudriñan tus gestos

convirtiéndolos en llamada.




No hay límites desde que descubrí contigo

como reinventar de modo imperecedero

las sensaciones del primer amor.






La oportunidad de vivir

miércoles, octubre 6, 2010 Permalink 0

Imagen: B. Read



Lo mejor de la vida

siempre está por venir.

Si bien olvidamos

la oportunidad de vivir.





No por mirar más lejos

abarcamos mayor espacio.

Ya lo decía el asno

con su zanahoria y el palo.





Al final la mente

es una trampa cruenta.

De la que solo te liberas

si exprimes los sentidos.





Me declaro algo Santo Tomás.

El final hace que necesite,

palpar, saborear, repasar,

escuchar y respirar (te.)






Secreto de a dos

martes, octubre 5, 2010 Permalink 0

A estas alturas ni intuyo, si los amores son eternos,

o deberían serlo.





Me gusta la sensación, aunque he de decir,

que no tanto el resultado.





Tanto viajar entre la ilusión y el olvido

ya no tiene sentido.





Quiero una mecedora que me mime entre olas,

sin moverme de tu lado.





Quiero escarmentar del comienzo, y anclar una esperanza fugaz

en brazos de tu eternidad.





Ando cansado de probar colchones con almohadas ancladas

a un pasado lejano.





Busco secretos de a dos. Trozos de piel intercambiable.

y noches que no sean de alquiler.





Un beso sin prisas. Una secuencia encadenada.

Un sinfín de caricias.





No es mucho. Lo sé. Simplemente,

es lo que quiero.





Imagen: B. Read.











Florece lo cotidiano

sábado, octubre 2, 2010 Permalink 0

Imagen: Ben Gossens




Prefiero la sombra de luna
que la forjada por el sol.
Bajo su tenue frialdad
la plata afina su verdad.



El sufrimiento es menos nítido.
La causa esgrime su fortaleza.
El tiempo se arremolina.
Las armas pierden su filo.



Lo que aspiraba se lo llevó el viento.
Lo que aprisionaba acaudilló su libertad.
Lo que ardía sin control sucumbió a la tormenta.
Lo que es invierno sueña la incipiente primavera.



Cultivando lo milenario
florece lo cotidiano.