Imagen: Ben Gossens.
…
Somos yonkis del perdón
con el corazón amputado.
Carnaza de bar,
y de abrazos pagados.
…
Nunca habrá un agujero,
lo suficientemente oscuro,
donde enterrar “de profundis”
mis errores y tus miedos.
…
En algún momento debemos
darnos cuenta, siquiera,
que de tanto menguar
ya, ni nos conocemos.
…
Me rescató una simple sonrisa.
Un roce de mano tendida.
El cariño centrífugo de tu ombligo.
El sonido de tus llaves cuando espero.
…
Puedo.
Pero no quiero.
Quiero.
Entonces puedo.