mi loca hiedra

domingo, diciembre 26, 2010 Permalink 0









Imagen: Daniele Manfredini.



……





La hiedra de mi jardín vive un poco alocada.

Cuando nació trepaba por el vástago de cáñamo

y juraría que bailaba con él.





Con el tiempo la trasplanté a un bancal del jardín.

Ya erguida sobre su propia savia

creí que cada tarde se estiraba un poco más.





Esta mañana, el viento estaba perezoso.

Tal vez cansado de los aullidos de la Navidad.

Me envolví en una manta y salí a pasear.

…..



La hiedra. Bendita hiedra.

Había culminado su estiramiento.

Y acariciaba sin miramientos

la farola que cada día le ilumina.





Mi hiedra. Mi loca hiedra.

Amante de seres inanimados.

Tal vez para seguir creciendo tarambana.

Tal vez por dispensar una brizna de vida.