La resistencia se reivindica
con acordes de guitarra.
La redención se presenta
incombustible y arrogante.
Los tótem señalan un pasado
que se antoja cercano.
Charcos que parpadean
bajo llanto derramado.
Estandartes que ondean
con desarraigo infinito.
Relatos insoslayables
sobre la temida nostalgia.
Ojalá.
¡Que nunca amanezca
lejos de tu boca!
Ojalá.