Amar no es sencillo.
Pero es inmensamente necesario.
Contemplar como la piel se aja
ante la mirada encendida de ella.
Zambullirte en el mar
y confiar en volver nadando.
Incluso cuando no has de volver
a sustentarte en sus brazos.
Mantener la vista al frente.
incluso cuando la noche cae
sobre el cándido beso
o la piel de tu espalda.
Solo tú tienes tu nombre.
Solo yo pronuncio su eco.
Solo tú tiendes la mano
Solo yo me cuelgo de ella.
Amar no es sencillo.
Aunque trates de liberar
la libertad de escoger.
El placer de acertar.
Alcanzar la ilusión
mientras vives entre horas.
O reclinas tu cabeza
sobre tu almohada.
Rezar para que no te vayas.
Acertar con las pinceladas
sobre el lienzo de tu boca.
Sobre la seda de tu pecho.
Observar cómo te alejas.
Y aprender a vivir
pronunciando la soledad
sin que puedas llorar.
Amar no es sencillo
Pero es vital.
Ineludible.
Celestial.