En las largas noches de otoño,
aprovecho los huecos que deja tu voz.
Recuerdo lo importante que es sentirte
cuando apenas consigo escucharte.
Bipolaridad insustancial
intensamente arcana.
Busco presencia
en lo inconsolable.
Sangre fresca que me regale
unos días más de vida.
Fragancia de tierra mojada
para mis tardes aciagas.
Olas batientes para aspirar
la reconfortante sal.
Algunas tardes,
la soledad es tan grande
que soy capaz de escuchar
como se encoge mi alma.
Eres quien me hace real.
Mi redención de la ceniza.
La crisálida de mi tortura.
El tañido en la densa niebla.