Tu eres quien me hace real.
Quien dibuja mi contorno contra la pared.
Quien ahuyenta mis miedos nocturnos.
Quien ancla mis sueños a la fecunda tierra.
Sobre tus pensamientos el viento caracolea.
Frente al espejo no cabe otra imagen real.
La última hoja que abate el otoño de la esperanza.
La pátina cristalina que regala el azul al mar.
El último hilo del que pende
esta atracción sobrenatural
que tu piel ejerce sobre mis manos
y hace el universo explotar.