Observo tus labios.
Perfectamente delimitados.
Explosivos, sugerentes.
Perfectos para olvidar el ayer.
Observo tus labios
y los míos recobran vida.
Una energía irrefrenable
te ofrece una noche imposible.
Aun no he decidido
si besarte con los ojos cerrados
o cogerte por sorpresa
y perfeccionarlo con tu mirada.