Si quieres decirme algo,
hazlo mirándome a los ojos.
Cerca.
Donde la distancia
no sea una excusa
lo suficientemente grande
para ser un capricho de tus deseos.
Quiero palabras francas
que no se deslicen por la piel
si no son sinceras
ni vienen para quedarse.
Si vamos a jugar
pongamos reglas.
Podremos saltarnos
a condición que podremos cambiarlas
si no es para seguir persiguiendo
aspas coloreadas de un molino de viento.
Elige esperanza.
Y no pondré condiciones.
Elige un color.
Y te entregaré un lienzo.