Una llama crepitante

lunes, enero 18, 2010 Permalink 0

Una tarde distinta.

Sentados junto al fuego

sin más espacio en medio

que la música que repiquetea.



Un silencio reflexivo

sobre lo sutil que llega a ser

la felicidad entre pares

cuando respiras el mismo aire.



Porque esta tarde trata

de estar acompañados.

De compartir silencios

con la mirada fija.



Me gusta fabricar recuerdos

en torno a una llama crepitante.

Y sabes que no te hablo

de la que nace del fuego.