Eres mi hogar.
Donde mi alma reposa.
Donde mi corazón se aligera.
Donde mi espalda se curva.
Tu y yo,
sabemos caminar en la oscuridad.
Eres la mano que me arrebata
del pozo de la desesperanza.
Creamos un espacio
donde el sacrifico fue leve.
Donde amar te volvía complaciente.
Donde lo concéntrico fue nuestro mundo.
Fuimos incapaces de amarnos,
aplastados en dos soledades.
Hasta que fuimos conscientes que,
el mundo se mueve y se para al mismo tiempo.
Vencimos el miedo
cargando con lo emocional.
Fuimos inteligentes
cuando nos dimos a conocer
Cuando nos sentimos débiles,
tocamos fondo.
Hasta que nos dimos cuenta
que ése era el comienzo.
Tú amas.
Yo abrazo.
Ambos vivimos.
¡De eso trata la vida!