¿Será pecado??

sábado, agosto 14, 2010 Permalink 0

La canícula caía a plomo.
Los párpados zigzagueaban.
Los sueños cogían el poder.
Tu cara todo el protagonismo…







Recordando la primera vez.
Tras mil palabras ahuecadas
en el espacio virtual de la noche.
que gritaban por su porción de piel.



Una suite con cocina y una cama de dos por dos.
Daba miedo tocar algo pero todo estaba dispuesto.
Había cocinado dos platos y un postre.



El primero un sutil marisco bañado el aceite, hierbas y limón.
Luego una soberbia lubina tostada su piel y confitada en miel.
Y de postre una bandeja de frutos rojos.



Todo regado con un cava burbujeante y provocativo.



El camarero se retiró en silencio.
Solo quedaba el fondo del cava.
Las luces. La música. Las flores.
Tu.
Y yo.



Nada podía superar el momento.
Salvo lo que vino después.



Tu perfume me hipnotizaba.
El escalofrío de la piel perlada de verano.
El aroma de dos personas incitadas.
La fragancia de unas sábanas que acunaban.



Solo recuerdo fugaces momentos.



Humedad.
Labios.
Caricias.



Palabras al oído.
Sonrisas,
Y un inolvidable amanecer.



¿Acaso será pecado pedirte repetir?

Texturizar tus abrazos

jueves, agosto 12, 2010 Permalink 0

La belleza tiene su destello diabólico.

Una mirada fugaz sobre ella,

y nos hipnotiza al instante.

Pierdo ante ti la propia conciencia.





A veces te observo disimuladamente.

Aunque te tengo enfrente casi prefiero

redibujarte íntegra y texturizar tus abrazos

Mientras escribo un poema inventado.





Se trata de dar vida a lo inexorable.

Elevarlo a los cielos.

Para luego volver a caer

y sofocar los infiernos.





Eres bella y solo yo te descubro.

No hay mejor regalo para reinventar

este corazón sin alma de vagabundo

que no ha hecho otra cosa mas que errar.




Me enredo en tu sueño

lunes, agosto 9, 2010 Permalink 0

Pienso en ti.

Me enredo en tu sueño.

Tus cándidas mejillas

inflamadas de placer.





Surco de lado a lado

tu esculpido escote.

Paro justo en el centro

donde tus clavículas nacen.





Mis dedos reposan sobre tus hombros.

Libres para acariciar o excitar.

Cada uno busca pliegues donde fertilizar

los deseos de esta mañana de aire y sal.





Estás inquieta.

La respiración convulsa

Acaso la piel se agrieta,

porque sabes hacia donde voy.





Muerdes tu pelo, casi lamiendo.

El cuerpo ya no te pertenece.

Hace tiempo que se debate

entre el éxtasis y la erupción.





Decides abdicar.

Abrir los ojos y mirar.

Como tu piel ya no es tu piel

y mis dedos tu cincel.








Érase una vez lo que nunca volverá a ser

sábado, agosto 7, 2010 Permalink 0

Érase una vez lo que nunca volverá a ser.



La primera vez.

El último aliento.

El silencio del miedo.

La magia inocente.





La frustración presente.

La perfección del momento.

El sudor de la palma de la mano.

El cariño de tu niñez ausente.



El sueño eterno.

La risa franca.

El aroma a ausencia.

El limbo de nuestro credo.



Me quedo con un simple sueño

mientras las estaciones del tren

se van recortando en el horizonte

y convergen las vías de acero.



“Se apaga la luz del cine. Te sientas a mi lado,

mientras extiendo palomitas en tu regazo

para recogerlas una a una confabulando,

ausencia de luz, deseo y una creciente emoción.”
















Dentro

jueves, agosto 5, 2010 Permalink 0

Dentro.


Donde mi soledad
es mi auténtico yo.


Es donde vivo
y algunas veces

muero.

La vital simiente

miércoles, agosto 4, 2010 Permalink 0

Me rindo a tu esencia.

A las sortijas de tu cabello.

A tu perfume a trigo maduro.

A tu piel dorada en el estío.





Al eco de tus pasos al perseguirme.

Al deseo que silencias bajo tu sonrisa.

Al loco despertar que me induces.

Al delicioso recuerdo de tu locura.







A veces me despierto

mirando un fecundo brote de sangre

que recorre la etérea piel de tu vientre

esperando a que gotee sobre mi lengua.





Donde tu vida concluye

brota la vital simiente

que sostiene mi vida

y rejuvenece mis sueños.